Nicolás Maquiavelo, admirador de Fernando Rey de Castilla, en su libro “Il Principe” recomendó a los grandes mandatarios de los imperios “divídelos y vencerás”. Del 28 al 30 de junio del año 1522 (Día de San Marcial), dos armadas se enfrentaron en los alrededores del monte Aldabe cerca de Irun. En los dos bandos había vascos. En un lado se encontraba la armada de Nafarroa, ayudada por Francia. La dirigían los señores de Urtubi y Senpere, constituida por 1000 labortanos y 3500 alemanes administrados por el rey de Francia. Frente a frente tenían la armada de España, dirigida por Beltrán de la Cueva hombre de confianza del Rey de Castilla y constituida por 3650 guipuzcoanos, vizcaínos y castellanos. Gracias a la astucia del cura de Orereta, la armada española venció a la Navarra y ocasionó una masacre de 3000 personas. Los vascos desistieron del intento de recuperar la independencia política. Desde entonces, aunque algunos quieran justificarlo mediante una reivindicación realizada por la milicia foral 300 años después, cientos de vascos la celebran año tras año en la calles de Irún.

Tomando como partida el Casco Viejo de Irún, nuestro querido Mosku, hemos querido reunir el simbolismo de su nombre, la música soviética y la memoria histórica. Y así, interiorizando la lección que el pueblo de Irlanda nos ha enseñado, queremos denunciar las celebraciones de las masacres en contra de nuestra soberanía.